Inaugurado en 1941 y reabierto en 2016, el Cafetín requiere una nueva imagen que reuna modernidad y tradición.
Para conseguir esto, se emplea una tipografía caligráfica. La curvas y los trazos evocan una escritura del pasado, pero la disposición, el contrapunto de la línea secundaria a palo seco, y un uso simple, proporcionan cierta actualidad.
La imagen de esta cafetería se realiza a partir de la tipografía Acryle Script, editando, modificando y equilibrando algunas de sus formas. Para la línea secundaria se emplea la tipografía Gotham.
La marca se adapta a distintos elementos informativos y publicitarios, y a la señalética.